jueves, 25 de noviembre de 2010

Como ser una perfecta dama según Caroline Bingley

 Hola tanto tiempo he vuelto después de una larga ... larga ausencia que no me acuerdo de cuanto tiempo fue, pero para mi fue eternaaaa =S
extrañaba su compañía siempre me pone de muy buen humor pasar por sus blogs.

Pero se estaba terminando el semestre y si a eso le sumamos el trabajo, como que la cosa se me complico un poco para actualizar este pequeño pedacito de mi.

dentro de poco empezaran mis vacaciones de la universidad, así que estaré mas seguido por acá, ya me pondré de apoco al día.

muchas gracias a las personas, que han decidido seguirme, ya estaré dandome una vueltita  por sus blogs.

A mis fieles seguidoras iré a visitarlas, para ver que a sucedido en mi ausencia !!

Acá les dejo unos consejos útiles de Caroline Bingley de como ser una buena dama. 

Creo que de alguna manera nuestra querida Jane Austen puso en esta parte, como veía ella a las damas de su época y podemos percibir como se instruían y lo que esperaba la sociedad de ellas.

Les mando un beso grande a todos !!
Gracias por visitar Jane Austen y sus libros.




–Me asombra –dijo Bingley– que las jóvenes tengan tanta paciencia para aprender tanto, y lleguen a ser tan perfectas como lo son todas.
–¡Todas las jóvenes perfectas! Mi querido Charles, ¿qué dices?
–Sí, todas. Todas pintan, forran biombos y hacen bolsitas de malla. No conozco a ninguna que no sepa hacer todas estas cosas, y nunca he oído hablar de una damita por primera vez sin que se me informara de que era perfecta.



–Tu lista de lo que abarcan comúnmente esas perfecciones –dijo Darcy– tiene mucho de verdad. El adjetivo se aplica a mujeres cuyos conocimientos no son otros que hacer bolsos de malla o forrar biombos. Pero disto mucho de estar de acuerdo contigo en lo que se refiere a tu estimación de las damas en general. De todas las que he conocido, no puedo alardear de conocer más que a una media docena que sean realmente perfectas.



–Ni yo, desde luego–dijo la señorita Bingley.
–Entonces observó Elizabeth –debe ser que su concepto de la mujer perfecta es muy exigente.
–Sí, es muy exigente.
–¡Oh, desde luego! exclamó su fiel colaboradora–.Nadie puede estimarse realmente perfecto si no sobrepasa en mucho lo que se encuentra normalmente. Una mujer debe tener un conocimiento profundo de música, canto, dibujo, baile y lenguas modernas. Y además de todo esto, debe poseer un algo especial en su aire y manera de andar, en el tono de su voz, en su trato y modo de expresarse; pues de lo contrario no merecería el calificativo más que a medias.




–Debe poseer todo esto–agregó Darcy–y a ello hay que añadir algo más sustancial en el desarrollo de su inteligencia por medio de abundantes lecturas.



–No me sorprende ahora que conozca sólo a seis mujeres perfectas. Lo que me extraña es que conozca a alguna.
–¿Tan severa es usted con su propio sexo que duda de que esto sea posible?


–Yo nunca he visto una mujer así. Nunca he visto tanta capacidad, tanto gusto, tanta aplicación y tanta elegancia juntas como usted describe.

8 comentarios:

  1. ¡Qué alegría, vuelves antes de Navidad!
    Te he echado tanto de menos!!!
    Sí, las mujeres tienen que tener unos modales delicados acorde con su compostura.... je, je.
    Bueno, yo creo que hemos sido capaz de reirnos y andar con gracia y ser más bellas que ninguna otra cosa del planeta tierra ¿no te parece?
    Bss. Queridísima coqueta!!

    ResponderEliminar
  2. Querida Ivy intermitente! yo también prontito estaré de vacaciones también, así que comprendo los motivos de tus ausencias.
    Já,já, mira con qué nos has salido: el discursito de Caroline alabándose a sí misma e intentando rebajar a Lizzie.
    No me extraña que sea una de las cosas que no se han atrevido a cambiar en ninguna versión con actores. Es una gran muestra de lo que se debía esperar de las señoritas de sociedad en aquella época, aunque Darcy parecía darle bastante más importancia a la inteligencia que su "fiel colaboradora".
    También es un buen ejemplo de la personalidad amable de Bingley, y el remate un ejemplo delicioso del carácter decidido de Lizzie, quien al mismo tiempo daba a entender lo que realmente pensaba de Caroline, al decir que nunca conoció a alguien así.
    En un diálogo bastante corto vemos mucho de cada uno de estos personajes. Brillante.
    Pasa a leer mi post de Netherfield cuando puedas linda, me son importantes tus opiniones.
    Beso grande!

    ResponderEliminar
  3. Hola Ivana!
    Se entiende perfectamente la ausencia, a mi también el trabajo me limita el tiempo que puedo llegar a estar conectada (últimamente dispongo de mucho tiempo porque sigo de licencia médica).
    Hablando de Caroline, realmente no la soporto, me parece una trepadora que lo único que desea es un matrimonio ventajoso.
    Pero lo que ella describe como una dama es lo que se esperaba de las mujeres de sociedad.
    Besos.

    ResponderEliminar
  4. Se que suena un poco a traición, pero, ¡ojala yo pudiera hacer todas esas cosas que Caroline Bingley enumera de forma perfecta!, seria un portento.
    Para mi que en este dialogo Caroline se describe a si misma jejeje, una manera muy sutil de emitir el mensaje "SOY TU MUJER IDEAL" a Darcy jejeje
    Besos:)

    ResponderEliminar
  5. Pues para darnos a nosotras una lección de cómo debía ser una dama la chica era bastante grosera.
    No es propio de una señorita de buena educación ofender y rebajar a otra a los ojos de los demás para sobresalir ella, y para mi gusto Caroline Bingley poca idea tenía de lo que era una dama "ideal".
    Bueno verte de vuelta, aunque sea de forma "intermitente".
    Besos.

    ResponderEliminar
  6. Mi querida Ivanna, me alergra verte de regreso, yo también voy recuperándome poco a poco y estoy procurando volver al mismo ritmo de antes. Me ha encantado revivir esas escenas del libro y con las fotos que has seleccionado, ha sido un deleite completo. Sin duda alguna, era todo lo que se esperaba en una señorita de sociedad en aquella época; hoy en día muchas cosas han cambiado, (enhorabuena) si bien es cierto, complementan, pero a mi gusto son demasiado superficiales y hasta banales diría yo. La inteligencia bien aprovechada, la gracia natural, y la secillez y nobleza de sentimientos son los atributos ideales que debieran esperarse en una verdadera Dama, ayer hoy y siempre.
    Por cierto, te aviso que ya está puesto el cuarto capítulo de Deber y Deseo de Pamela Aidan, lo que sucede es que blogger no está actualizando mi entrada en los blogroll, date una vuelta por mi blog a penas puedas.
    Un beso sincero y un placer estar aquí.

    ResponderEliminar
  7. Ivana te estoy echando de menos, tal como a Lady Darcy y a otra amiguita más de Jane Austen, espero que no tardes en volver... te amiga...Bss.

    ResponderEliminar
  8. Ivanita, se te extraña, espero que estés bien.
    PS. te aviso que he subido el capítulo V de DEBER Y DESEO. Blogger sigue jugándome sucio y sin actualizar mis entradas.
    Besitos.

    ResponderEliminar

http://janeaustenysuslibros.blogspot.com/2010/08/esta-escena-del-libro-transcurre-cuando.html Related Posts with Thumbnails